El 18 de diciembre, la Iglesia celebra una fiesta mariana profundamente ligada a la esperanza y expectación del nacimiento de Jesús: la memoria de Santa María de la O, también conocida como la «Fiesta de la Espera del Parto». Esta tradición, de raíces hispánicas, nos invita a unirnos a María en su anhelo por la llegada del Salvador.
Un poco de historia
La fiesta fue establecida en España por el décimo Concilio de Toledo en el año 656, como preparación para la Navidad. En esta jornada, los fieles meditaban sobre el misterio de la Encarnación y acompañaban a la Virgen María en su espera gozosa por el nacimiento de Cristo, el Mesías prometido.
El nombre «Santa María de la O» proviene de una costumbre litúrgica particular: durante la oración de la tarde en las Vísperas, el coro sostenía una larga y solemne «O», expresión de maravilla y esperanza. Esta «O» simbolizaba el clamor del universo por la redención y la inminente llegada del Emmanuel, «Dios con nosotros».
Significado espiritual
Santa María de la O nos invita a reflexionar sobre tres actitudes fundamentales:
- Maravilla ante el misterio de la Encarnación: Como la Iglesia, nos unimos en asombro al contemplar cómo Dios se hizo hombre por amor a nosotros.
- Esperanza confiada: María es modelo de espera activa, con el corazón abierto a los planes de Dios.
- Preparación espiritual: Este día nos anima a preparar nuestras almas para recibir a Jesús, no solo en Navidad, sino cada día de nuestra vida.
Las antífonas de la O
La celebración también está relacionada con las antífonas mayores de Adviento, conocidas como las «Antífonas de la O». Estas se rezan desde el 17 al 23 de diciembre en la Liturgia de las Horas, y cada una proclama un título mesiánico de Cristo:
- O Sapientia (Oh Sabiduría)
- O Adonai (Oh Señor)
- O Radix Jesse (Oh raíz de Jesé)
- O Clavis David (Oh llave de David)
- O Oriens (Oh Sol que nace)
- O Rex Gentium (Oh Rey de las naciones)
- O Emmanuel (Oh Dios con nosotros)
Estas antífonas culminan en el gran «O» del 18 de diciembre, que expresa el clamor del pueblo de Dios por la llegada del Salvador.
Lecciones de Santa María de la O para nosotros
- Vive con esperanza: Como María, confía en que Dios cumplirá sus promesas en su tiempo perfecto.
- Prepara tu corazón: Este día nos recuerda la importancia de preparar nuestra vida para acoger a Jesús con fe y alegría.
- Acompaña a la Virgen en su espera: Une tus oraciones a las de María, quien nos enseña a vivir con serenidad y confianza.
Oración a Santa María de la O
Oh Santa María de la O,
Madre de la esperanza y la fe,
enséñanos a vivir con alegría la espera de tu Hijo,
a preparar nuestro corazón para recibirlo
y a proclamar con nuestra vida la maravilla de su venida.
Amén.
Fiesta: 18 de diciembre
Santa María de la O, ayúdanos a vivir este Adviento con los ojos puestos en Cristo, nuestro Salvador. 
¡Maravilla, expectativa y esperanza nos llenan el alma en este día especial! 
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